Sólo tenemos que mirar alrededor para comprobar lo dispar entre zonas; de las actuaciones que se cometen dependiendo con/contra quién.

Veamos… Sevilla Este, domingo por la noche. Había junto a unos contenedores algunos muebles tirados. El domingo por la noche no hay recogida de enseres. Yo, que he intentado usar este servicio, nunca he tenido la posibilidad de que recojan los muebles el fin de semana. Incluso preavisando por la web, los muebles se quedan tirados en nuestros barrios semanas completas. Al día siguiente pasé por el lugar: ya no estaban los muebles.

Nueva forma para que los vecinos no se caigan

Martes 19. son las 8.00 de la mañana. Doce operarios de Parques y Jardines en la zona del Colegio Alemán, dispuestos a sus labores. Había tal batiburrillo de trabajadores en una zona tan estrecha que se molestaban los unos a los otros con sus instrumentos de trabajo. A los pocos minutos llego a mi barrio, La Negrilla, por la rotonda del Altair. Hay trabajos de jardinería también (¡pa’ qué luego digan!), pero en esta ocasión sólo un señor mayor que recibía instrucciones desde una furgoneta de Parques y Jardines… uno solito.

Otra cuestión: el botellón. ¡Vaya lata la suciedad, el ruido y las molestias que ocasionan, más aún cuando están cerca de viviendas! Pues bien, la suciedad no dura lo mismo en nuestros barrios que en Los Remedios. ¿Os acordáis del botellón de Los Remedios? Entre la feria y Lipasam… pues eso. Cosas comunes: la juventud (y no tan juventud) que deja asqueroso el lugar de ocio. Peeeero, en este caso, el domingo por la mañana la zona en cuestión, recogida y limpia como la patena.
Incivismo… sobra.

Lipasam… falta, pero especialmente aquí.

Más diferencias… tras el vendaval que sufrimos en Sevilla meses atrás, estuvimos padeciendo en nuestras calles durante semanas los árboles caídos y estructuras derribadas, con las molestias y peligro que conlleva. En esas mismas fechas, en Prado de San Sebastián, observé atónita cómo un operario de Lipasam se dedicaba a recoger ramitas del suelo. ¡Ramitas! El grosor, lo gordo, lo urgente, parece ser que fue retirado ipso facto. ¡Qué maravilla!

¿Habéis llamado alguna vez a la policía por ruido de algún velador o por las carreras de coches y os habéis quedado esperando a que aparecieran o hicieran algo efectivo para ayudar? No dudes que si quieren, pueden actuar. A nosotros, BH, nos ha parado en Su Eminencia, pleno verano, 9 de la noche. Nos ha hecho retirar la megafonía porque «estaban casi seguros de que había alguna normativa en contra y mirando por el bienestar de los vecinos». Insisto: verano, 9 de la noche, sonido de megáfono bastante más bajo que la radio de los coches que pasaban alrededor (como en una película de Berlanga).

¿No os ha pasado o conocéis a alguien que ha llamado a las fuerzas de seguridad por algún problema y resulta que ni aparecen ni te informan? Algún representante «público» se excusa con la escasez de agentes… Sin embargo, en cada acción que convocamos aparece tanto policía local como nacional, UIP… a mansalva, a cascoporro, decenas. Superando a veces, de manera vergonzosa, al número de protestantes.

¿No somos conscientes de la permisividad que tiene, por ejemplo, la Inspección de Trabajo con las grandes multinacionales que incumplen reiteradamente los convenios y el Estatuto de los Trabajadores? Sin embargo, la contundencia con la que sancionan al pequeño negocio por cualquier nimiedad desmoraliza al más pintado.

¿No le da vergüenza al Ayuntamiento decirnos (cuando hay obras aprobadas, olvidadas en un cajón durante años, con partida presupuestaria) que no hay dinero… y, simultáneamente, el alcalde se gasta (de nuestro dinero, claro) casi un millón de euros en poner farolas fernandinas en el centro (donde ya había farolas operativas, no como las nuestras)?

Para cambiar farolas en el centro sí hay dinero

¿Cómo aprueban un presupuesto de 4 millones de euros para cubrir, ostentosamente, Plaza Nueva de mármol e inmediatamente se acordona, señaliza y manos a la obra, del tirón?
¡Igualito!

¿Cómo soportamos que nos manejen los que no nos ponen solución a nuestros cortes de luz? Tras manifestarnos mil veces, okupando centros cívicos, entrevistándonos con todas las instituciones, desde las locales, autonómicas, estatales… a las europeas, al Defensor del Pueblo y a su santa madre… Y que no se mueva un dedo para paliar la plaga de los apagones. Peeero cuando se va la luz en la feria (15 minutos) se hace una inversión de 3 milloncetes, sin necesidad de convocar ni Mesa de Luz, ni manifestaciones, ni reuniones… absolutamente nada. Caído del cielo. Amén. Y si en la Calle Cuna hay un problema con el suministro, rápidamente todo se pone en marcha. ¿O alguien lo duda? Amén también.

Obras de urgencia en calle Cuna, que no falte de nada

Y así podemos escribir un libro… ¿qué digo un libro? ¡Una saga de quinientos tomos gordos como los cachetes de Falete!

¿Cuándo va a llegar la gota que colme el vaso? Tenemos gotas para ahogarnos.
Si te fastidian estas injusticias, la inmovilidad colectiva, que nos engañen una y otra vez sin ninguna repercusión, si te fastidia todo esto, ¡no estás sol@!

Hagamos algo, dejemos de ser indiferentes, porque no nos lo podemos permitir. Nos va la vida en ello, y cada vez nos queda menos para reaccionar.

Lo que pensamos no cambia nada; lo que hacemos, sí.

Únete a Barrios Hartos. Es hora de remangarse.

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