La sociedad capitalista engendra todo tipo de violencias. Nuestros barrios dan buena cuenta de ello: paro forzoso, miseria creciente, abandono de los servicios sociales, colegios masificados, abandono de enfermos, colas del hambre… Y como no puede ser de otra manera en un modelo de sociedad anclado en el patriarcado, que está ligado a los intereses de las élites económicas, todas estas formas de violencia se recrudecen sobre la figura de las mujeres.
Estas lacras se transforman en formas de violencia extremas, a manos de sujetos enfermos de un machismo estructural.
Los Barrios estamos Hartos de toda forma de violencia, y estamos en primera línea contra la VIOLENCIA MACHISTA. Contra la violencia de los machistas y de las instituciones oficiales, las cuales aún se comportan la mayor de las veces como cómplices de aquéllos, tanto en la «justicia» como en lo que corresponde a inversiones sociales.
VIVA LA LUCHA POR LA LIBERACIÓN DE LA MUJER
